¿Es tu meta de salud adelgazar o llegar a estar más activo?
La ciencia sugiere que habría que pensarlo mejor antes de volverte a parar en la báscula. Es recomendable comenzar a sudar e intensificar tus ejercicios en la maquina para caminar.
En un estudio reciente, la inactividad se tradujo en un mayor riesgo de enfermedad cardíaca, independientemente del índice de masa corporal (IMC) de una persona.
Ponte en Marcha
El IMC es una medición del peso total del cuerpo que toma en cuenta la altura de una persona. Los expertos médicos lo han usado como un indicador de la grasa corporal y por lo tanto una herramienta para determinar el riesgo de enfermedad. También lo hace la Organización Mundial de la Salud (OMS). – Todo lo relativo a este tema lo explico latamente en mi libro; “Un Hombre, Un Entrenador, Un Sueño”-.
Sin embargo un estudio reciente, demostró que las personas inactivas se encontraban en una categoría superior de riesgo del corazón independientemente de su IMC. Parece que la manera sedentaria que la mayoría de la gente está llevando su vida les esta haciendo tener una cintura desproporcionadamente grande, independientemente de cuánto o cuán poco se incline la balanza. Y una cintura demasiado grande significa un gran problema para el corazón.
En un próximo árticulo te entregaré algunas buenas pautas de que hacer para desterrar la flacidez del vientre. Aunque para empezar te sugiero una caminata diaria y/o una rutina suave de ejercicios en un gimnasio gratis.
La Composición Corporal
Tener un índice de masa corporal dentro de un rango normal es grandioso, pero no es el alfa y omega de la buena salud. Tu puedes tener un IMC normal y todavía estar poco saludable – especialmente si no te ejercitas. En el estudio reciente, los hombres inactivos tenían un riesgo mayor de enfermedad cardíaca futura en comparación con los hombres activos. De nuevo, esto es independiente del IMC y de la báscula.
Las mujeres con riesgo de muerte por esta condición, es incluso peor que en los hombres cuando se trata de riesgo de enfermedad cardíaca, y todo porque la actividad afecta en proporción al cuerpo. El ejercicio hace que sea menos probable que la grasa de tu cuerpo se acumule en el lugar más peligroso que puedes almacenar: alrededor de tu abdomen y hacia arriba de el.
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